Visita al Pozo Julia

 El pasado viernes 14 de abril los grupos de 3º de ESO visitaron varios lugares de interés histórico y turístico en el municipio de Fabero. Gracias a Chencho y a su equipo –a quienes estaremos siempre agradecidos por la visita- los alumnos conocieron un economato, la arquitectura y las viviendas del poblado minero, el Aula Paleobotánica y la Escuela del Ayer.  

Pero el objeto principal de la visita eran las instalaciones de la empresa Antracitas de Fabero en el Pozo Julia. La empresa –llamada antes “Diego Pérez” – llegó a emplear unos 4.000 trabajadores y tecnología mecánica pionera. Oyendo, viendo y leyendo, y hasta manipulando elementos del trabajo cotidiano los estudiantes dieron sentido a las instalaciones de la empresa faberense, haciéndose una idea de cómo se desarrollaba el proceso extractivo del mineral, en qué consistía el trabajo de los operarios, cuál era su procedencia geográfica, qué importancia tuvo la lucha obrera o el poco conocido aún papel de la mujer en la mina. 

El salario no era malo. Lo malo era tener que bajar a picar a la mina. Aparte de la extrema dureza de las labores en un espacio reducido, podía haber explosiones, derrumbes o inhalaciones de gases nocivos. Eran riesgos de accidentes que había que correr tras el pan de cada día. Otros riesgos eran seguros, el de respirar partículas que iban alimentando la silicosis en los pulmones. Así transcurrieron los días en la cuenca minera del Alto Sil hasta que las minas fueron cerrando, cerrándose también un capítulo en la historia de toda la comarca.  

Unidos por el río Cúa, Cacabelos y Fabero son símbolos de la historia económica reciente de El Bierzo. No en vano en el escudo de la bandera de la comarca figuran los martillos de minero y las hojas de la vid. Agotado el ciclo del carbón, el futuro podría pasar por la industria agroalimentaria complementada por el turismo. Y los aficionados al turismo cultural tendrán en Fabero una parada obligada gracias al trabajo de los que se esfuerzan en poner en valor el patrimonio minero.  

Queremos agradecer a nuestro compañero Daniel González Nieto, profesor de Geología, que nos haya acompañado y además instruido durante la jornada, así como también desearle lo mejor en su nueva andadura profesional.