Tras un arduo trabajo de investigación, los integrantes del equipo de geología forense de 1ºESO consiguieron finalmente resolver el caso del asesinato de Gonzalo Pangea.
Bajo un halo de misterio que se dejaba notar en el ambiente –algunos miembros del equipo apuntaban a la dificultad de trabajar en tales condiciones- el caso dio un giro de 360° a media mañana del jueves al confirmarse que los principales sospechosos del caso –Jacinto Compostela y Esmeralda Karst- presentaban coartadas que les exoneraban de cualquier culpa. Las pruebas en cambio apuntaban al hermano del fallecido, Luis Pangea, quien a la hora del crimen podría haber perpetrado el asesinato tras la datación realizada. El posterior análisis de laboratorio efectuado sobre los fragmentos de roca y minerales encontrados junto al cuerpo del cadáver confirmaron la autoría del caso.
Imágenes que muestran el correcto precintado de la escena del crimen, así
como la adecuada señalización del entorno con marcadores quimioluminiscentes
Al parecer, el móvil del asesinato era una jugosa herencia familiar que Luis quería acaparar quitándose de en medio al malogrado Gonzalo, dos años mayor que él. Amigos y familiares no salen del asombro, como han reconocido a este medio.
Detalle de uno de los integrantes del equipo en plena resolución del
caso. A la derecha, se observa al coordinador del equipo tras una maratoniana
jornada de investigación.
Desde la redacción de La Voz de Cacabelos queríamos dedicar estas últimas líneas a agradecer el excelente desempeño del equipo de geología forense implicado en la resolución del caso. Sin lugar a dudas, la comunidad se siente ahora más tranquila, conociendo vuestra profesionalidad y saber hacer.
Estamos muy satisfechos de vuestra labor. ¡Seguir así!
Veo que por esos lugares hay que ir con los ojos bien abiertos y no despistarse. Quién no preste atención corre peligro...
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